lunes, 15 de julio de 2013

Fofuchas "mellizas" de Gimnasia Rítmica

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Si me sigues desde el principio no te resultará extraño ver 2 muñecas. Mis sobrinas, las mellizas, hacen Gimnasia Rítmica y son extraordinarias; no es amor de tía y madrina ¡¡tendríais que verlas!! 
Recientemente ha sido su cumpleaños y sabíamos que querían tener una de estas muñequitas. En la última ocasión que compitieron vimos que una mamá la llevaba para una de sus compañeras y como los retos son mi pasión, ese mismo día me puse a trabajar. 

Os comento un poco los pasos básicos que realizo: 

Antes de nada hay que documentarse:

No encontré ninguna referencia en Internet, lo más parecido una bailarina de ballet y en realidad no tiene mucho que ver así que comencé fijándome de la fotografía más reciente que tenía mi hermano.


Los detalles también cuentan:

En este caso, la personalización es de alto nivel y no vale hacer cualquier maillot, ni cualquier peinado, ni siquiera cualquier calzado, ha de ser como en la realidad. Peinado con moño, sin flequillo, con orquillas azules a juego con el maillot y mucha brillantina. 
Maquillaje azul en los parpados y más brillantina. Maillot de manga larga, en blanco y azul con una flor de lentejuelas que empieza en el hombro y baja hasta la cintura, falda azul y blanca y muchos brillos en todo el maillot. Para finalizar punteras o puntillas en los pies. 




No me hizo falta investigar mucho más sobre el deporte pues también lo practique en mi juventud y lo recuerdo todo. Hice todos los aparatos: Pelota, Aro, Cinta, Cuerda y Mazas, que dejé sueltos para que los puedan ir variando en la medida que ellas vayan cambiando de aparato en la realidad y una cesta para que no los pierdan. Bueno, veremos lo que duran...

La base es un cuadrado de cartón reciclado forrado en el exterior con cartulina marrón y en el interior con goma eva verde como con pelito y que recuerda al césped. 


Hand made with love:

Otro paso importante es el cariño que se pone en cada trabajo, además suelo pensar en la persona a quién va dirigido el regalo mientras lo hago. Son personas de mi entorno por eso puedo y hacerlo aumenta la creatividad. Creo que es el motivo por el que se me ocurrió hacer mariposas, florecillas y hasta un caracol. 


Limpieza en la realización: 

Por último y no menos importante los cortes limpios, sin rastros de pegamento o silicona y la difícil expresión de la cara va mejorando poco a poco. ¿Lo notáis?

Al abrir los regalos nos pareció ver un brillo de emoción en los ojos de Inés y se que acertamos porque vino corriendo y me dio un abrazo que jamas olvidaré.





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